quarta-feira, 10 de junho de 2015

La cultura comunicativa en un modelo de enseñanza más experiencial



La cultura comunicativa en un modelo de enseñanza más experiencial

 Al formar un grupo de alumnos para estudiar una lengua extranjera, el profesor sabe que va a depararse con muchos desafíos; uno de los principales es la diferencia de características presente en cada alumno, pues el alumnado no va sólo escuchar y absorber todo el que maestro le pasa; el estudiante va a confrontar informaciones, va a reflejar sobre aspectos que ya los ha estudiado entre otras conexiones que hará, pues el individuo que vine aprender el idioma trae consigo su propio bagaje cultural.

El estudiante de español como lengua extran¬jera no sólo habrá de adquirir un conocimiento lingüístico, sino además un conocimiento cul¬tural que le sirva para vivir, sobrevivir, adap¬tarse y comprender mejor las manifestaciones lingüístico-comunicativas de la sociedad o las sociedades portadoras de la lengua que está estudiando.

 Es tarea del docente favorecer el proceso de aprendizaje del alumno, exponiéndolo a muestras auténticas de la lengua según el contexto o entorno social; seleccionando o construyendo textos que ejemplifiquen los contrastes sociolingüísticos; dirigiendo la atención del alumnado a todos los puntos de contraste, explicándolos y discutiéndolos; haciendo correcciones en los momentos oportunos y cuando necesario; proporcionando ejemplos suficientes sobre los comportamientos más adecuados sin descartar la enseñanza explícita, o sea, cabe al profesor acercar ese mundo al estudiante no nativo.

 Estos cuidados que deben ser tomados durante la clase se confirman en las palabras de Bernárdez (1995) “para asegurarnos de que el receptor está entendiendo lo que yo, como productor, estoy comunicando es muy importante el con¬texto, y en este sentido si provenimos de cultu¬ras diferentes, es muy probable que no estemos entendiendo exactamente lo mismo. Esto viene a significar que hablar una lengua no implica aprender a usar sólo el conjunto de sus reglas gramaticales, sino que el estudiante no nativo tendrá que desarrollar otras capacidades de la competencia comunicativa”.


La enseñanza del español debe promover el acercamiento entre la cultura hispánica y la del país de origen, así como construir una imagen auténtica de aquella y colaborar con la destruc¬ción de tópicos y prejuicios. 
   (Instituto Cervantes, 1994)

El estudiante de LE es un ser socializado que continúa socializándose en nuevos entornos culturales sin permitir que la diversidad sea un obstáculo para la comunicación.

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